viernes, 31 de octubre de 2014

DECLARACIÓN DE BIENES


Hoy leo en La Nueva España, uno de los periódicos asturianos, que los políticos, o algunos de ellos, de nuestra Comunidad han hecho públicos sus bienes. En el artículo se citan a varios con tantos inmuebles, tantos dineros en distintos bancos, tantas hipotecas, tantos coches, tantos planes de pensiones, etc. Pues bien, hasta ahí perfecto.
Pero me pregunto quien avala estos datos porque, si se hace de manera voluntaria, cada uno pondrá lo que mejor le venga, ¿o no?
No obstante, ¿alguien se pude imaginar a uno de ellos diciendo que tiene cuentas en Suiza o en las Islas Caimán, por ejemplo?
Vamos, que todos estos datos, no es que dude de ellos, pero se los pueden guardar. Lo que tienen que hacer es declararlos cuando acceden a un puesto o los enchufan en él, con el visto bueno de Hacienda, y declararlos cuando vuelven a su vida normal, donde quiera que realicen esta, verificados por la misma institución.
Que conste que tanto antes como después pueden engañar, claro que sí, pero al menos, si afanan algo, no valdrá contarnos que fue una herencia o que son unos listillos jugadores de bolsa ni inversores con un tacto más que fino para los negocios.

Pásenlo bien y disfruten del fin de semana.

miércoles, 29 de octubre de 2014

HABLAR


Me fijé en cuanta gente me rodeaba y hablé.
Pero nadie me oyó.
Entonces, viendo su indiferencia, grité.
Levantaron la cabeza y murmuraron entre ellos.
Pero continuaron a lo suyo.
Probé con susurros.
Sus caras me indicaron su sordera,
su ceguera sus ojos,
y sus ropajes su mundo.
Por fin, callé,
como un muerto de la Edad de Piedra
como un ahogado del Diluvio Universal,
como un niño ante la visión de un dragón,
como un hombre solitario en el desierto,
como un creyente ante Dios.
Y entonces la gente se acercó,
y estupefacta me miraba,
y me preguntaba curiosa,
y me movía con manos de falsa seda,
incluso se asustaba ante mi ausencia.
Y mis palabras no surgieron,
se atragantaban en mi garganta
y me quemaban en la lengua.
Y me quedé allí, solo.
Más tarde, cerca del río,
les conté,
en silencio,
mis sueños a las hojas otoñales
de los castaños, de los nogales y de los robles,
las mismas que nunca te fallan,
que te escuchan,
que te hacen llorar
aunque nada más sea
por empatía
al verlas a ellas mismas
a un paso de morir.

Un saludo y disfruten de un gran día.

Y SIGUEN, SIGUEN, SIGUEN,...


¡Ya van tantos que no sabe uno si escribir sobre ello o no! Los casos y tramas de corrupción en nuestro país son tan numerosos que los ciudadanos, ante la noticia de algo nuevo, en lo único que piensan y de lo que hablan es “y los que quedan, que aún no sabemos; lo mismo de unos que de otros, son todos iguales”.
Ya sé que no se pueden meter a todos los cargos públicos en el mismo saco, pero resulta que quienes aparecen salpicados o convertidos en un cochambroso adán por mor de tanto dinero sucio como se le ha quedado pegado por todo el cuerpo son siempre aquellos que han tenido o tienen cargos de responsabilidad política en instituciones que deberían relucir como los chorros del oro ante los ciudadanos. Y, claro, cuando las siglas políticas, sindicales o empresariales de esos ladrones y supuestos aparecen al lado de su nombre, ¿qué se espera que puedan creer los pobrecitos de a pie, los paganini de la crisis, los que han llegado a tal nivel de cabreo que ya no reaccionan siquiera ante semejantes fraudes? Pues que nuestros gobernantes son una manada de bollos preñaos que esconden todos dentro un chorizo mayor o menor en función del sarao en que ande metido.
Cuando, ante los nuevos datos de la Operación Púnica, vemos a los dirigentes salir a la palestra a pedir perdón, ya no se les cree, han agotado la vergüenza que pudieran haber sentido el primer día. ¡Y de eso hace ya tantos años....! Ahora solo les queda una una manera de hacerlo y deberían de consultarlo con la almohada o mejor con la opinión de la gente de a pie: pedir perdón, sí, entregar el dinero robado, meter en la cárcel a los culpables ya y acto seguido dimitir, irse, dejar que los ciudadanos vuelvan a las urnas y den su confianza a quien mejor les parezca. Que vuelven a salir votados los mismos, pues a aguantarlos toca y seguir echándonos las manos a la cabeza cuando cometan alguna de sus fechorías; que salen otros, a controlarlos y ver qué es lo que pueden hacer mejor. Pero los que no deben estar ahora planteándose como atajar la corrupción son los partidos que se han hecho acreedores de contar en sus filas con el mayor número de desalmados que recuerda la historia de nuestro país. ¡Es lo que nos faltaba! Y lo peor es que, si nadie lo impide, lo harán, para que las leyes sigan protegiéndolos de cualquier dolo y estafa que cometan sus correligionarios. Y luego, con decir que ellos respetarán a los tribunales, se quedan tan panchos. ¡Como si no fuesen ellos mismos quienes nombran a los jueces y fiscales que habrían de velar por la transparencia en estos asuntos tan delicados! Y si uno de estos se mueve, no es que no salga en la foto, no, es que lo defenestran per sécula seculórum. Amén.

Sigan su vida e intenten hacer que sea lo más feliz posible. Pasen un buen día.

jueves, 23 de octubre de 2014

¡Y VENGA ALTERNATIVAS!


Hace ya unas semanas que en la prensa aparecen noticias sobre la posibilidad de ofrecer a los alumnos de nuestra comunidad más alternativas que escoger, dentro del horario de libre disposición que tiene la Consejería de Educación del Principado en el currículum de Educación Primaria sobre todo, aunque también de Secundaria. Es interesante constatar como, cada vez que surgen estas noticias por parte de determinados sectores, siempre lo hacen en referencia  a la Llingua Asturiana. Es algo que tienen metido entre ceja y ceja, son gente que aún no se han dado cuenta, o no quieren, que una asignatura así sea imprescindible para los alumnos y alumnas que cursan estudios en nuestra comunidad con el fin de que, al menos, conozcan algo referente a su historia, a su vida, a la vida de la patria en que nacieron o donde viven, y que marca de alguna manera su forma de ser, incluso a la lengua que se habla aún, mal que les pese, y se habló durante cientos de años, refrendado esto por estudios de lingüistas de índole internacional.
Considero, y es casi una convicción, que lo único que tratan es de echar esta asignatura, su enseñanza, a pique. Se ofrecen otras alternativas, siempre a la Llingua, muy atractivas tanto a padres como a alumnos; piénsese en el estudio de otro idioma o en la informática, algo que saben que puede echar al fondo del mar del conjunto de asignaturas el estudio de la Llingua, porque tanto padres como niños consideran que, a la hora de elegir, podrían ser más interesantes de cara al futuro. Tal vez estos sectores que pujan por que la Consejería oferte otras alternativas pueda pensar algo más, como por ejemplo ofrecer la alternativa a la Religión también dentro del mismo cuadro. ¿Os imagináis que esto fuese posible, que hubiese sectores que en vez de la Llingua se lo planteen a la Religión Católica, por más que una y otra fuesen evaluables dentro del currículum? Los padres y alumnos elegirían ente Religión o Informática, u otro idioma más, o Cine, o Fotografía, o fútbol, o qué sé yo. Pero no, el caso es que sea Llingua, es decir, acabar con ella, ya no negándola porque saben que es una batalla perdida, sino poniendo al alcance de los niños un caramelo que les guste a todos.
Y ante esto solo queda una solución para evitar más tonterías: que los políticos de una puñetera vez hagan cooficial la Llingua en Asturias. Y el que quiera usarla, que lo haga; y el que no, pues que no. Pero el derecho, igual para todos, y dejarse de “babayaes”.

Que ustedes lo pasen bien y disfruten de un buen día.

 

"LE PETIT NICOLAS" ESPAÑOL DEL XXI


Lo del joven Francisco Nicolás Gómez Iglesias, ese chico al que le han dado por llamar pequeño Nicolás siguiendo la estela de René Goscinny, ese autor francés que inventó a su “petit Nicolás”, un niño capaz de volver loco a sus padres exponiendo las paradojas e incoherencias que se daban a su alrededor de acuerdo con la visión que tenía del mundo adulto que él no entendía, decía, que lo de ese joven clama al cielo. Pero no porque, según comentan algunos estudiosos y expertos, fuese un megalómano extraordinario capaz además de engañar a cualquiera, sino por su arte para encandilar y fascinar a los demás, incluso lograr que estos se dejasen voluntariamente ser embaucados para conseguir logros mayores. No debían condenarle a nada, debían de colocarlo en algún puesto donde poder desarrollar sus aptitudes tan fabulosas como ha dejado más que suficientemente demostradas; a fin de cuentas en poco se diferencia de aquellos con los que fue visto, es decir,  gente que pone  su imagen a disposición de lo que sea que se le pida, mientras por detrás no son más que fabuladores y flautistas de Hamelín que nos engañan y nos llevan a donde desean por más que nosotros despotriquemos contra ellos. Habrá que buscar, eso sí, quienes son los responsables de que estos hechos protagonizados por este pequeño Nicolás del siglo XXI hayan podido suceder y a esos mandarlos al infierno del olvido por ineptos. Y eso si no se esconde algo más debajo de la alfombra.
 

Diviértanse y pásenlo bien. A fin de cuentas España sigue siendo el mismo país de pícaros de toda su historia.

jueves, 16 de octubre de 2014

ICONOS DE PAPEL


¿Qué os ha parecido lo del famoso, hasta hace bien poco, sindicalista Sr. Villa? ¿Verdad que parece sacado de una película de Hitchcock? Es decir, intriga a raudales, pero al final se descubre la verdad, o eso deseamos. ¿Quién lo iba a decir de ese señor con bigote, tan “mecagunmimanto” él, defensor a ultranza de las cuencas mineras asturianas, que nos dio lecciones de honestidad y defensa de los intereses de todos por encima de unos pocos? Si bien nadie puede dudar de que, aunque no solo, desde su sindicato (que lo era, suyo, porque el que no estuviese de acuerdo con sus decisiones ya podía coger la maleta e irse con viento fresco a otra parte) los mineros consiguieron muchas cosas, cabe preguntarse qué y cuánto cayó en sus manos, o en sus bolsillos, a cambio de determinadas acciones. De momento no se sabe aún, pero esperemos que no quede en el tintero y los asturianos y el resto de españoles consigamos conocer el origen de esa fortuna ganada, sin duda, con el sudor de su frente, es decir, de la frente de los demás. Como la fortuna de tantos otros, iconos de papel viejos y arrugados cuyo destino en cualquier país normal sería la hoguera.
Una vez conocido el acogimiento por parte de este presunto fullero a las medidas dictadas por nuestro Ministro de Hacienda, esas por las cuales muchas personas que hicieron negocios dudosos o muy ciertos fuera de la legalidad española tuvieron acceso a regularizar su situación pagando a nuestro estado una mínima parte de lo que habrían debido, todos sus compañeros se han lanzado sobre él como verdaderos buitres. A saber cuántas ganas le tendrían. No olvidemos que durante décadas fue el puto amo de la política socialista asturiana y mucho tuvo que ver en España desde la cúpula del PSOE allá por los años ochenta. Aquí en Asturias no se movía un dedo sin que él lo supiese y nadie daba una voz más alta que otra, si no quería quedar afónico ipso facto y acabar enterrado para siempre en el olvido institucional.
Hoy, José Ángel Fernández Villa nos debe muchas explicaciones, entre ellas cómo es posible que hubiese podido amasar esa fortuna sin que nadie se enterase. Porque, ¿de dónde salió ese dinero y a cambio de qué fue a dar a una cuenta en el extranjero? Mucho me temo que nos vamos a quedar con las ganas de saberlo todo. Fijaos que ni desde la oposición se atreven mucho a atizarle por ello (¿por qué será?).
Es muy fácil que no pase de ser otro caso más que se irá difuminando en el tiempo, como ya van…, y en el que además los que ponen el dinero para las corruptelas sigan también agachados, fuera de la foto. Y eso que “tanta culpa tien el que mata como 'l que tien pola pata”.

Pasen un buen día y sean felices.

martes, 14 de octubre de 2014

NOS TOMAN POR MENTECATOS


Cada vez son más las voces que se levantan para pedir la dimisión del Consejero de Sanidad de Madrid y de la Ministra del ramo del gobierno actual. Quién sabe, tal vez lo hagan. No obstante, lo que deberían haber hecho ya tanto Rajoy como Ignacio Glez no es esperar a que dimitan, sino haberlos fulminado cesándolos hace ya unos días. A los ciudadanos de este país nos han estado acostumbrando a necios como estos y o bien ya somos incapaces de discernir una buena o mala gestión, o bien pasamos olímpicamente de ello clamando en el desierto lo de que todos son iguales. Es casi seguro que ya estamos tan hartos de semejantes individuos que nos parece que, cambien a quien cambien, los nuevos van a seguir haciendo lo mismo. Así que qué mas da uno que otra. Nos toman por mentecatos e incluso en ocasiones actuamos como tales.
Lo peor de todo es que nuestros gobernantes lo saben y por eso siguen en sus trece atribuyendo los errores al personal de la calle. Tengo la impresión de que quedan bien pidiendo en voz alta y muy atribulada, si es necesario, perdón por sus decisiones, aunque en el fondo, y hablando para ellos mismos y sus correligionarios, siguen achacando la culpa de todos sus males a los españolitos que se hacen oír denunciando tales hechos. Y mientras sigan ahí los de siempre, mal nos va a ir a todos los que los sufrimos.

Sigan tranquilos e intenten ser felices.