Este hombre lleva unos meses con los sesos tan fritos como
una torrija de la abuela. Me refiero a Rajoy. Solo a él se le ocurre andar
enviando sms a Bárcenas después de la aparición de las famosas fotocopias de El
País. Además, animándole y diciéndole
que no se preocupara.
De repente Bárcenas se hastía del cuento que se llevaban y tanto fue
el cántaro a la fuente que al final se rompió. Ahora nada más hace falta
esperar para saber en cuantos trozos quedó el pobre cántaro y, aún más, si esos
trozos no los vuelven a despedazar convirtiéndolos en añicos. Porque de momento
hemos conocido una pequeña parte de todo el meollo, es decir, los nombres de
diversos políticos que se permitieron el lujo de cobrar cuanto les venía en
gana a pesar de haber declarado el presi que en el PP nadie venía a hacerse
rico, es más, que incluso perdían dinero. Pero todavía faltan más, hasta llegar a los que ingresaron dinero a espuertas en ese partido a cambio de obras públicas.
Pero es que de repente aparece un dandy amigo del esquí y les
destroza el plan que tan bien tenían montado.
He leído que Carlos Floriano dijo ayer u hoy, no sé, que
los famosos mensajitos cruzados entre ambos al PP les preocupa cero, acusa al
PSOE de estar en connivencia con Bárcenas el supuesto delincuente y dice que
este último está chantajeando a Rajoy, pero ni ha conseguido nada ni lo
conseguirá nunca. Para él todo el asunto Bárcenas es un embrollo para desacreditar a su partido y punto. Este hombre, Floriano, si echara un
vistazo a la hemeroteca y leyera cada una de sus declaraciones desde enero, sería
un firme candidato a un soponcio a lo bestia. Si tuviera lo que se le exige a
cualquier persona honrada, que no es más que un mínimo de dignidad, se callaría
y mandaría a otros que defendiesen el asunto. Y es que él no pegó una desde que
surgió este escándalo. Al menos en algo actuó con decoro: no negó la veracidad
de esos sms,…de momento. Mañana ya veremos lo que cuenta.
Un saludo y feliz semana.
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