domingo, 10 de enero de 2016

AL FINAL,SÍ. ¿Y AHORA?


Y Mas se apartó. Increíble, pero cierto, porque nadie daba un duro o un céntimo por esa resolución, que bien podría haber tomado hace un par de meses. Y ahora la CUP hará posible la investidura de un nuevo President, Puigdemont, casi ya ex alcalde de Girona. Escribía yo hace cuatro días que, aunque la negativa de Mas a irse y de la CUP a apoyarle se daba por hecho, todo podía dar un giro inesperado de última hora porque las conversaciones en Cataluña aún no había terminado y aún quedaban un par de días. Ahora queda por ver hasta cuándo aguantará en el cargo el nuevo President hasta que convoque nuevas elecciones. No obstante, Puigdemont ya se había retratado en el pasado por sus claras ideas sobre el independentismo catalán, aunque su partido de cabecera fuese CDC, que en su momento se declaraba solamente como nacionalista. Dos términos estos, nacionalista e independentista, que contienen ciertos matices que los hacen ser distintos, quizá, aunque el fin último, por lo visto, sea el mismo.

¿Y ahora qué? Si siguen adelante con su pretensión de independencia, de una nueva república catalana que los separe de España, ¿cómo piensan reaccionar el actual gobierno estatal en funciones y los partidos políticos representativos que surgieron de las últimas elecciones generales? Porque de nada sirve esa coletilla con la que nos quieren enredar acerca de que hay que cumplir la ley y ese paso es anticonstitucional. En Cataluña, en el Parlament, ya han dicho que todo eso de la ley y la constitución españolas son cosas de España, pero que ellos son o quieren ser otro país, por lo tanto, a ellos no les afecta lo que puedan decir. Es como si España quisiera meterse a gobernar en Francia o en Suiza, o Alemania quisiera gobernar España, aunque eso sí se hace, perdón, me equivoqué de ejemplo, pero puede valer otro país. Y tienen razón porque, si ellos entienden y declaran que Cataluña es independiente, las leyes españolas se las refanfinfla. ¿Y a dónde nos lleva esto? En Madrid no tienen soluciones, a no ser que, como ya hubo algún exaltado nacionalista español, quieran meter los tanques en el noreste peninsular. ¡Menuda barbaridad! No se lo cree ni quien asó la manteca. Si echamos la vista atrás, no muchos años, eh, podremos darnos cuenta de donde proceden estos lodos que solidifican a pasos agigantados. Pero estoy seguro que algunos partidos se lavarán las manos y nos saldrán con que la salvaguarda de España como nación es lo primero, cuando en realidad fueron ellos quienes la rompieron con el estado de las autonomías hace años con el acceso de las distintas regiones a ello de acuerdo con un calendario escrito y hecho para sus propios fines. Y aunque quisiese entender ese proceso distinto para cada una, algo fue mal posteriormente con el paso de los años. Lo agrandaron tanto, ese estado autonómico, que ahora las diferencias entre españoles de distintas comunidades es abismal en algunos derechos. y en esto es donde hoy falla el estado de las autonomías. Aquel famoso café para todos, se convirtió en café para unos pocos y aguachirle para los demás. Ahora los del café quieren hacerse con el cafetal y los demás ni a aguachirle llegaremos. Aquellos que inventaron los de café y el bebedizo inmundo deberían ser los que pagaran por ello, pero aún siguen ahí, estropeando el eje de la noria, es decir, jodiendo la marrana.

 

Sean felices y disfruten del día con la sonrisa siempre por delante.

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