LUZ, TAQUÍGRAFOS Y FE

Ante todo, claridad. Lo de la luz y los taquígrafos es una expresión muy de moda entre nuestros políticos cuando suceden casos “raros” dignos de ser comentados, criticados e incluso a causa de ellos ser vilipendiados las personas que estaban metidas en el ajo. No hace mucho, la Presidenta del PP aragonés, Luisa Fernanda Rudi, decía  en la última reunión de la ejecutiva de su partido sobre el caso del ex: Luz y taquígrafos, y que nadie juegue en solitario.

Y llega el asunto a la Junta de Portavoces y a la Mesa del Congreso donde la oposición, en su papel, que no es otro que tocar las narices al gobierno de turno con razón o sin ella, pide que Montoro explique de verdad la amnistía fiscal o que Rajoy dé explicaciones fidedignas sobre este caso de corrupción en el que está involucrado mientras la justicia no diga lo contrario o que se cree una comisión de investigación, y el PP, el de la luz y los taquígrafos, veta todas las iniciativas para esclarecer el asunto. Dice el representante del PP, Alfonso Alonso, que ellos confían más en la Justicia y en la garantía que dan los jueces y fiscales. Le faltó añadir que también confían en Gallardón como ministro de Justicia y en Torres Dulce, el Fiscal general del estado que ellos mismos nombraron.

No sé qué hace en Asturias el PP tan encorajinado porque la comisión de investigación del caso Marea lleve dos años sin crearse. Que dejen a la justicia y que se dejen de tanta comisión. Tomen ejemplo de su representante en el Congreso.

Vamos a ver, ¡cómo los vamos a creer!

No sé lo qué dirá ahora Rudi.Seguro que tendrá explicación para ello: las eléctricas que cortaron el suministro debido a las fuerte deuda que los españoles tenemos con ellas, y los funcionarios del taquígrafo se habrán ido a tomar el café de las once o están de manifestación.

Lo que pasa es que ellos y ellas, muy en su papel de santos varones, de misa y comunión diaria, y virginales damas, de rosario y procesiones con mantilla española, a lo único a lo que apelan para investigar es a la fe, a que los españoles nos fiemos de su palabra y a creerlos porque son unos santos. Todo muy católico y bendito por la Santa Iglesia. No pueden hacerse a la idea de que hay españoles, muchos millones, a los que la fe se la trae al pairo y lo que desean son pruebas reales, explicaciones con pelos y señales sobre el muladar en que se está convirtiendo este caso Bárcenas.

Decía Feijóo que en el PP no caben pillos. Será que está la habitación hasta arriba y no hay libre ya ni un milímetro cuadrado. Y como no se espabilen, se les van a escapar los que están dentro por las ventanas y a ver como la vuelven a llenar. Ya saben lo que les dijo el Presidente extremeño: como la situación siga así, expuso, vamos a tener más crisis de vocación que la Iglesia.

Lo malo para  los de a pie es que de momento sabemos donde están metidos los de un partido y los de otro pero, como se escapen, a ver quien los encuentra, ya les pueden echar un galgo. Y entonces, a andar con más cuidado todavía... ¡guardemos las carteras, si los precios y los impuestos nos dejaron algo! 

Pásenlo bien y sean felices. Un saludo.