¿Quién
me iba a decir a mí que iba a estar de acuerdo con Esperanza Aguirre? Pues mira
tú que hoy durante la presentación de un libro de uno de sus amigos de la
Comunidad madrileña, se lanza de cabeza y pide una serie de medidas que deberían
de llevarse a cabo en España cuanto antes. Estas medidas, al menos algunas, me
entran a mí por los ojos de tal manera que llego a la conclusión, una vez leídas,
de que o algo está cambiando en su interior o bien está planeando algo raro de
cara al futuro.
Afirma,
después de varios de meses de que hayan salido resultados devastadores para los
partidos en general y cada vez peor, que “los ciudadanos nos van a castigar
primero en las urnas y luego con su desprecio”. Pues sí, Sra. Aguirre: lo de
las urnas lo puede tener tan claro como yo; lo del desprecio, seguramente no se
ha dado cuenta de que ya se lo han mostrado la mayor parte de esos ciudadanos
cada vez que les preguntan por ustedes, no hace falta llegar a las urnas para
ello.
Pide
también acabar con las subvenciones públicas a los partidos, estoy plenamente
de acuerdo con ello. Ellos, como los sindicatos y cualquier fundación que
dependa de ellos, deben de sufragar sus gastos con las cuotas de sus afiliados.
Y tener además, sobre sus cuentas, un estricto control por parte de Hacienda
con el fin de evitar que las donaciones, que deberían ser con nombres y apellidos,
se conviertan de buenas a primeras en sobres raros o en concesiones de obras públicas
dudosas.
Y por último,
nos habla de las listas abiertas. ¿Está usted segura de lo que dice? Por mi
parte, de acuerdo, ya lo dije muchas veces. Y además, con claridad, que todos
sepamos qué estamos votando y a quién. Saber que esas personas, cercanas a los
ciudadanos, se hallan a nuestra disposición y que sepan también, como nos
daremos cuenta los votantes, que quien la hace la paga. No el partido, que en
las listas cerradas lleva escondidas personas de dudosa reputación y luego se
llama a andanas cuando les sale tordo alguno de ellos, sino esas personas en
particular.
Mira
qué bien. Por una vez me puedo mostrar de acuerdo con la Sra. Aguirre. Ahora a
ver qué opinan sus congéneres políticos, de uno y de otro lado. Ya veréis qué
poco caso le hacen, Pero usted no se canse, siga adelante con esos principios,
que es lo que piensa la inmensa mayoría de los españoles.
Un saludo. A pasarlo bien.
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