Pues resulta que a Rajoy and
company, en cuanto Asturias y Cataluña se plantearon gravar a las entidades
bancarias con un impuesto, lo mismo que otras tres comunidades llevaban
haciendo ya hasta ese momento, a este grupo encargado de amargarnos la vida día
sí y otro también por más de once millones de españoles crédulos e infelices
como ellos solos hace poco más de un
año, se le ocurre a nivel estatal poner un impuesto ellos a la banca: un
impuesto del 0%.
¡Cuánto me alegraría que con los
ingresos de este impuesto les pagaran a ellos!
Pero el amigo hacendoso de Rajoy, el Montoro ese, después
de unos meses, se da cuenta que a tres comunidades que ya lo tenían previamente a esas dos Comunidades no puede
quitarles ese dinero que iban a recaudar y que constaba en sus presupuestos
para el 2013. Y entonces, ¡hágase la luz!, nos cuenta en sede parlamentaria que
está elaborando y pergeñando en su ministerio un aumento de ese impuesto del
0%, pero muy poco, muy poco, con el fin de devolver ese dinero a Extremadura,
Andalucía y Canarias. O lo que es lo mismo, va a gravar un poquito a todos los
españoles, ¿o acaso os creéis que no va a caer de rebote en todos nosotros?
¿Pensáis que los bancos van a pagarlo con una parte de sus beneficios? ¡No seáis ilusos, por Dios!
Y pensemos otra vez: ¿va a gravar a la banca de esas
comunidades que precisan de ese dinero? ¡No! Será un impuesto estatal, es decir, que los asturianos,
cántabros, castellanos, leoneses,… vamos a pagar, sin que revierta ni un solo
céntimo en nuestras comunidades.
¡Joder! ¿En qué estaban pensando aquellos once millones y
pico de ciudadanos para endilgarnos a estas joyas? ¡Y a pesar de su
incompetencia para solucionar los problemas de España y su sumisión al férreo
yugo de Merkel aún siguen ahí! ¡Ufff, lo que nos espera si seguimos soportando
que sigan dando palos de ciego que siempre caen sobre las mismas espaldas!¡Menuda paliza vamos a recibir!
Un saludo y buen día.
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