martes, 7 de mayo de 2013

PACTO, RESCATE Y DINERO


Uno va, abre un periódico, el que sea, rebusca un poco por las noticias esas pequeñitas que se esconden en una esquina de la página izquierda  y siempre encuentra alguna chuminada. Pero si te las encuentras en primera plana o en el interior, en la página de la derecha, y a todo trapío, las chuminadas pasan a ser algo más serio. Debemos de tomarlas como vienen y de quien vienen. Es difícil no echarse a temblar porque, en cuanto se lee la letra pequeña, y no solo los titulares, algo habrá que atufe y que te obligue a echar las manos a la cabeza o a soltar algún que otro taco.
Resulta que tanto hablar de llegar a pactos entre los distintos partidos del arco parlamentario, o al menos entre los dos principales, para intentar salir de esta situación en la que estamos hasta el cuello, y el Presiente ya dice por adelantado que solo accederá a ellos si los demás asumen sus políticas, es decir, las del gobierno. ¡Coño, digan por delante que no quieren pacto ninguno y se acabó! No desean llegar a ningún tipo de acuerdos, quieren obediencia ciega y que los otros agachen sus cabezas y las escondan en la arena. Así no se va a ningún lado.
Usted defiende su política porque de lo contrario hubiésemos tenido que ser rescatados por Europa. No sé, creo que aún intenta engañarnos a los que vemos las cosas de otro modo. Sí hubo rescate, de muchos miles de millones, pero se fueron todos a la banca porque sí, porque así lo pactaron con Merkel para que los alemanes respirasen aliviados y pudiesen cobrar lo que les debían los bancos españoles. Mientras tanto, una gran parte de ese rescate nos toca pagarlo a los españoles, a los de a pie, no a los de los despachos que se van con pensiones que dan vergüenza a cualquiera..
Cuando habla, y se pone tan serio como si hubiese evitado un charco que amenazaba con salpicarle el chaqué, no sé que hubiese sido mejor a la vista de cómo estamos en este momento. Soy un total analfabeto en materias económicas y es fácil que me diga que peor, pero estando como estamos… Si por lo menos nos hubiesen contado con palabras claras y entendibles qué hubiese significado ese rescate, en vez de hablarnos de mira cómo están Grecia, Portugal, etc., a lo mejor le dábamos o no la razón. A fin de cuentas ¿cómo estaban esos países? Alguno de nosotros sabemos algo más que las manifestaciones en la calle. Porque lo que es recortes, en España no se han quedado cojos, ¿no? Nos han amenazado tanto con el dichoso recate que ya casi lo tendríamos que ver como un demonio, con rabo y pezuñas, con cuernos y echando arsénico por la boca y las orejas.
Es como ahora que el BCE ha rebajado los intereses al 0,5%. Todo son congratulaciones y dichas. Se hace, dicen, para reactivar la economía de los países sobre todo del sur europeo. ¡Ja! A ese dinero solo pueden acceder nuevamente los mismos, las entidades bancarias. ¿Pero acaso se cree alguien que ese dinero va a llegar en forma de créditos a quien los necesita? Sería lógico pensar que, como el interés es tan bajo, a la persona que pide un crédito se lo darán a un interés proporcionado, pero vaya usted y espere a la cola hasta que eso sucede. Le llevarán directamente, desde allí, al cementerio. porque dinero que entra en un banco por estos medios, desaparece ipso facto.¡Esto es cosa del Sumiciu- diríamos en Asturias.
Lo que está visto, y hasta ahora ha quedado claro, es que salvar a España de la crisis, tanto para estos últimos gobiernos de España como para el BCE o el FMI o la Comunidad europea, es salvar a los bancos y mejorar sus ganancias hasta límites insospechados.
Y aquí seguimos, esperando a ver qué pasa. Lo mismo que el gobierno que no sabe a donde tirar. El día que esto se acabe, porque tarde o temprano lo hará o romperá por algún sitio, lo tendremos a usted, Sr. Rajoy, a pie firme, si sale bien, con el pecho henchido, contándonos la milonga que todo fue gracias a este gobierno, y si sale mal echándole la culpa a los socialistas. ¿Se le pasará por la cabeza que lo vamos a creer? ¿O no? De todo habrá en esta viña del señor, seguro.
Pasen un buen día y, aunque sea sin ganas, sonrían, por favor.

*Sumiciu: personaje mitológico asturiano que hace desaparecer los objetos de forma impredecible y en el momento más inoportuno.

 

1 comentario:

  1. No se de que te estrañas, nin. Desde siempre los pactos que propone el PP -tanto estando en el poder como estando en la oposicion- solo dependen de una premisa "que los demás, gobiernen o sean oposicion, aprueben lo que el PP quiere". Partiendo de esta premisa sobra todo lo demás.
    Así lo entiendo yo y no creo que esté equivocado.
    Hermano mayor

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