El PP tiene un problema: su secretaria general. Claro que tiene más, pero...
Mª Dolores de Cospedal no aguanta la presión que
actualmente está sufriendo su partido. A lo largo de las últimas semanas lo ha
ido demostrando en distintas apariciones en público y en todas ellas, por un
lado o por el otro, ha tenido que salir por donde ha podido sin haber dado
nunca la impresión de ser una política calificada y capaz para desempeñar el
puesto que tiene hoy en su partido.
Las últimas declaraciones realizadas ayer en las que
comparó a los escraches con el nazismo fue el colofón a esa serie de
expresiones, explicaciones y comparaciones que hizo hasta hoy. Se revolvió ante
esta gente llevándonos otra vez a aquellos años treinta del siglo pasado
previos a la Guerra Civil. Unos años que todos los españoles a los que les tocó
vivirla no quieren ni por un segundo loco que se la mienten; y a los que no les
tocó, no tienen en mente volver a vivir una situación desastrosa para cualquier
nación, país o estado como es el enfrentamiento armado entre personas de un
mismo territorio.
Y es que ella, por el puesto- más bien puestos- que ocupa,
no puede decir esas cosas a sabiendas de que un escrache no es eso ni tan a la ligera se lo puede comparar de esa manera. Ha dejado claro a los ojos de los españoles
que no está preparada para su cargo y que sus limitaciones para dedicarse a la política
son las que son. El PP debería intentar buscar cuanto antes un repuesto para
ella, si no quiere que les siga destrozando el partido.
A fin de cuentas, el tema de los desahucios es uno más de
los frentes que tiene abiertos y en los que no da una respuesta satisfactoria a
la sociedad, pero dejando a la Sra. de Cospedal seguir hablando y actuando a su
aire se están haciendo un flaco favor.
Un saludo y buen domingo.
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